La renta básica universal (RBU) es un pago mensual sin condiciones que el estado le daría a cada persona mayor de cierta edad iniciando la adultez independiente de si es pobre o rica. A Colombia aún le falta mucho para poder proveer una RBU de mínima subsistencia, pero una RBU de un bajo monto podría ser el inicio de un programa a largo plazo que podría ayudar en gran medida a las personas más pobres.
Recientemente los políticos colombianos han empezado a hablar acerca de la renta básica (no universal), pero esto no es ningún programa novedoso, es simplemente un cambio de nombre a los subsidios focalizados de siempre. Una renta básica universal permanente tendría efectos muy diferentes a los subsidios focalizados y temporales que están proponiendo.
Estas son las razones más importantes a favor de la RBU:
Si nos comparamos con otros países a nivel mundial y regional, podemos ver que la desigualdad de Colombia es vergonzosa. Es necesario reducir la desigualdad, entre otras razones, porque los más ricos de Colombia no necesariamente se la ganaron con el sudor de su frente como cuenta 'la leyenda', muchos tienen como razón de su riqueza las herencias; las rentas de capital que poco aportan a la economía como arriendos e intereses; los amiguismos y roscas al conseguir trabajo; los negocios oligopolísticos como el bancario; la especulación financiera que tiene una enorme dósis de suerte; las contrataciones estatales amañadas y corrupción; los negocios ilegales como el narcotráfico y contrabando y hasta la simple suerte. Las personas en la pobreza no necesariamente están ella por pereza y falta de iniciativa, muchos son pobres por simple falta de oportunidades. Es necesario nivelar estas injusticias y el sistema tributario colombiano no lo está haciendo pues no logra reducir el nivel de desigualdad. Se necesita un nuevo programa de distribución de la riqueza verdaderamente estructural que logre reducir la desigualdad y la RBU cumpliría con este objetivo rápidamente.
Los subsidios que tienen un umbral mínimo de pobreza para acceder a ellos son una motivación perjudicial para que las personas se mantengan en la pobreza. Por ejemplo, si cierto subsidio solo se da a personas que ganan menos de 600 000 $, esto es una motivación para que alguien prefiera no aceptar un trabajo de salario mínimo para no perder el subsidio. La RBU soluciona este problema porque la renta sería para todos; trabaje o no trabaje, rico o pobre. Para los ricos sería un descuento a la hora de pagar los impuestos y los pobres recibirían siempre la RBU más lo que ganen con su trabajo y si tienen oportunidad de ganar más en su trabajo, lo podrían hacer sin temor a perder la RBU.
El estado colombiano es muy grande, está lleno de burocracia, corrupción, puestos creados para pagos de cuotas políticas, despilfarro e ineficiencia. Un programa de RBU podría ser un reemplazo progresivo de muchos programas del estado que se prestan para la corrupción. Por ejemplo, el programa de la alimentación en las escuelas: si en vez de darles migajas a los niños y pagarlas a precio de banquete a los contratistas amigos, este dinero se entregara directamente a los padres, se podría eliminar a los contratistas y sus márgenes, a los políticos y sus mordidas y a los funcionarios ineficientes atornillados. Eliminar toda esta fricción, ineficiencia y corrupción lograría una mayor eficiencia del uso de nuestros impuestos pues saldría más barato que los padres compren la alimentación de su hijo con parte de su RBU a que el estado a través de sus procesos (correctos e incorrectos) la adquiera y se la entregue.
Un programa de RBU es relativamente simple y sus costos administrativos y necesidad de burocracia serían mínimos comparados con otros programas estatales. Las cuentas de una RBU serían tan simples que cualquier persona podría entenderlas y auditarlas. A los corruptos se les complicaría mucho inflitrar, confundir y robar en un programa tan fácil de implementar transparentemente como este.
Al gasto que hacen las personas día a día se le llama consumo, un consumo fuerte es fundamental para la salud de la economía. El dinero en manos de las personas ricas puede generar inversión (aunque no siempre) que también ayuda a la economía, pero no genera un consumo significativo pues los ricos invierten y acumulan dinero mucho más de lo que gastan. Si se redistribuye parte del dinero de las personas más ricas hacia las más pobres, este dinero se gastaría en productos o servicios que estas personas pobres antes no podían adquirir. El dinero de la RBU circularía nuevamente en la economía generando un círculo virtuoso de más consumo, más ganancias para las empresas, más reinversión, más desarrollo y más riqueza para la sociedad en general.
A medida que un programa de RBU se fortalezca e incremente su valor mensual los empleados empezarían a ganar una mejor posición de negociación frente a los empleadores. La razón para trabajar ya no sería: "Tengo que aceptar este trabajo mal pago porque si no me muero de hambre", la razón sería: "Este trabajo me satisface y me paga bien, pero si no fuera así, podría no aceptarlo y esperar un poco más". Esta libertad de no elegir un trabajo explotador y mal pago forzaría a que los empleadores mejoren su oferta laboral. La RBU también le permitiría a algunas personas emprendedoras disponer de un ingreso base mensual que les daría más libertad para arriesgarse a realizar emprendimientos que no harían si no lo tuvieran.
Los programas estatales toman decisiones sobre lo creen que es mejor para las personas: entregan comida seleccionada por ellos, ofrecen educación pública con énfasis en ciertas áreas, eligen ayudar a ciertas regiones más que a otras, dan subsidios a ciertos sectores económicos, entre otras. Estas decisiones suelen ser tomadas por políticos desconectados desde un escritorio en Bogotá. Incluso si se tomaran con el mayor rigor posible, nunca podrán ajustarse a las diferentes necesidades, deseos y capacidades de cada una de las personas. En vez de dar bienes y servicios de dudosa calidad y proclives a la corrupción, darles directamente dinero les daría la libertad de elegir en que lo quieren usar. Por ejemplo, una persona podría decidir ahorrar este dinero para mejorar su educación en el futuro, otra decidiría gastarlo en mejor alimentación para su familia y otra en ayudar a un familiar que está en dificultades económicas. Esto permitiría en muchos casos sacar al estado del medio que quiere decidir que cantidad de impuestos se destina para una y otra cosa y se empoderaría a las personas para que usen el dinero de la RBU según consideren que es su necesidad más urgente.
Una vez se empieza a focalizar un subsidio, se empieza a ser injusto con quienes no lo reciben. ¿Deben recibir más las personas pobres con 4 hijos que las personas pobres más responsables con su situación económica que solo tienen un hijo? ¿Deben recibir más los indígenas y afrocolombianos que los mestizos igualmente pobres? ¿Debe recibir más un desempleado vago que no está buscando opciones de ingresos que una persona en similar situación económica que se la rebusca y logra conseguir 300 000 $ mensuales? Decidir quienes reciben o no reciben un subsidio es sujeto de multitud de discusiones y polémicas y con cualquier decisión que se tome terminan quedando personas injustamente por fuera de estos. Una RBU estaría libre de estos dilemas: todos la recibirían por igual.
Existen además estafadores que engañan al sistema de subsidios para aparentar lo que no son y recibir subsidios que no se merecen. Controlar que esto no suceda genera un alto desgaste y costo administrativo al estado. Con la RBU esto no sucedería porque no habría manera de engañar al sistema pues no existirían condiciones que falsear para recibirla.
Aunque actualmente no representa una amenaza al mercado laboral en Colombia, la automatización y la inteligencia artificial son una sombra enorme en el horizonte que podrían llevar a millones al desempleo. Iniciar un programa de RBU ahora permitiría que a medida que la automatización avance y empiece a afectar el mercado laboral, el valor de la RBU se incremente para evitar que las personas caigan en el desempleo y la pobreza. Con la automatización y la RBU se podría pensar a largo plazo en llegar a una sociedad en la que las personas puedan elegir trabajar solo medio tiempo y obtengan el resto de sus ingresos con la RBU. Llegar a esto sería un proceso lento que iría dando cada vez más libertad de trabajar menos tiempo mediante el incremento progresivo de la RBU, compartiendo así los frutos del avance tecnológico con todos a medida que estos vayan dando. De esta manera, todos participaríamos en los beneficios del incremento de la productividad de la economía, obteniendo más tiempo libre, más ingresos y una vida más satisfactoria.
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Por David 6/11/2021
